De Nigris y Chicharito, frente a unos EEUU con Donovan en el banquillo

Chicharito celebra con De Nigris el tanto ante Honduras

Estados Unidos tiene hoy una gran oportunidad de tomarse la revancha de hace dos años, cuando México le endosó una sonrojante derrota por 0-5 en la final de la Copa de Oro en territorio yankee. Los estadounidenses llegan a la final en un mar de dudas, tras sufrir frente a Panamá su primer derrota de su historia en la fase de grupos de esta competición. Precisamente, los centroamericanos fueron su rival en semifinales y sólo un gol de Depmsey a un cuarto de hora de la prórroga, puso lógica a la final del torneo. El equipo de Bob Bradley llega sin su mejor juego, vive de los toques de calidad del mediocentro del Fulham y de la efectividad del delantero del Villarreal Jozy Altidore. Además, sigue sin dar con el equipo titular al dar minutos incluso a Freddy Adu y, en medio, la gran polémica: su jugador más carismático, Landon Donovan, ha sido suplente en los cuartos y las semis. En frente estará México, una selección que ha arrollado durante la fase de grupos, pero que ha tenido problemas en cuartos ante Guatemala, partido que empezó perdiendo, y en semis ante Honduras, a la que venció en la pórroga. Eso sí, cuenta con los dos pichichis del torneo: Chicharito Herández, con siete goles, y Aldo de Nigris, con cuatro. Para el partido, dentro de la excelente media de este campeonato, se espera un lleno histórico con más de 90.000 espectadores en el mítico Rose Bowl de California, escenario de la final del Mundial ´94.